El dirigente reveló que debido al ingreso de las cooperativas mineras está ocasionando una división en las comunidades porque algunos se están dedicando a la minería por la falta de recursos y desinformación.
La Central de Pueblos Indígenas de La Paz (CPILAP) y el pueblo Esse Ejja, en un pronunciamiento público, han exigido al Juzgado de Rurrenabaque, en el Beni, que haga cumplir la medida cautelar que determinó en septiembre de 2024 la paralización de toda actividad minera en los ríos.
"Hemos presentado un memorial de apersonamiento ante el juzgado de Rurrenabaque exigiendo que se haga cumplir la resolución judicial que se resolvió en 2024, vemos un incumplimiento de las acciones que se han determinado. Estamos preocupados porque sigue habiendo asentamientos ilegales, están ingresando por la división a las comunidades indígenas", informó a la ANF el presidente del CPILAP, Noé Macuapa.
El 9 de septiembre de 2023, el juzgado de Rurrenabaque concedió tutela a la acción popular que presentó el Cpijap (sic) donde se ordenó paralizar toda actividad minera ilegal en los ríos Beni y Madre de Dios, en Tuichi, Quiquibey y Tequeje.
Al respecto, el dirigente cuestionó que la autoridad jurisdiccional no haya emitido ninguna conminatoria contra los demandados a casi dos años de emitir la resolución para que se cumpla lo legal. Consideró que existe una supremacía a sus derechos porque la actividad minera aún está vigente.