Medio Ambiente asegura que de 8.400 focos de calor se redujeron a 500 en los últimos nueve días


El ministro de Medio Ambiente, Carlos Ortuño, aseguró el domingo que, de 8.400 focos de calor en la Chiquitania, que sufre por los incendios forestales, se redujeron a 500 en los últimos nueve días.

"Tengo acá los datos oficiales que nos han pasado, alcanzamos en el día 17 de agosto a 8.400 focos de calor, en este momento el dato que tenemos del día de hoy (domingo), hasta las 10 de la mañana, teníamos 500 focos de calor identificados", precisó al programa "El Pueblo es Noticia".

Afirmó que esos datos representan una reducción significativa, por el trabajo intenso que realiza el Gobierno nacional en coordinación con la Policía Boliviana, las Fuerzas Armadas, Bomberos, voluntarios, entre otros.

Explicó que aún se monitorea la región tomando en cuenta que la prioridad es preservar la vida humana y silvestre.

Ortuño informó que, según datos oficiales, al 22 de agosto, 35% de la superficie afectada, son bosques de diferente naturaleza, mientras el 65%, arbustos y pastizales.

"Este es un elemento muy importante porque cuando hablamos de unas dimensiones de quema tan grandes como olas que estamos viendo en este episodio de emergencia, si decimos que todo es bosque reamente estaríamos haciendo una evaluación equivocada", fundamentó.

Explicó que los trabajos de operación aérea, con la llegada del avión bombero "Supertanker, es progresiva y se "ataca" los lugares donde existe un mayor riesgo de afectación a las personas.

Dijo que se pretende evitar que el fuego se expanda al área del parque nacional Tucabaca, donde se evidenció tres focos de calor.

Por otra parte, el Ministro de Medio Ambiente informó que, según un reporte del Viceministerio de Defensa Civil, hasta las 19h30 del 24 de agosto se registraron 1.817 familias afectadas y 10 familias damnificadas.

Ratificó también que se instalaron albergues de manera coordinada con el Ministerio de Medio Ambiente, la Gobernación de Santa Cruz y el zoológico de esa ciudad oriental, para albergar a los animales silvestres rescatados del incendio.