Unas horas después de que integrantes de la llamada Resistencia Juvenil Cochala (RJC) rodearan las oficinas de la Fiscalía General del Estado, en Sucre, pintaran el frontis con frases como “Renuncia, Lanchipa, pedófilo”, y encendieran llantas en la vía pública exigiendo que el fiscal general Juan Lanchipa dé un paso al costado, finalmente dicha entidad abrirá un proceso penal en contra de la agrupación por “daños al patrimonio histórico”. La institución recordó que las instalaciones donde funciona la misma pertenecen al primer Banco Central de Bolivia (BCB), que forma parte de la riqueza histórica boliviana y que es reconocida por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
El municipio sucrense, agraviado por los hechos, decidió sumarse a la determinación. Condenó el accionar de los movilizados y manifestó que han dañado el valor patrimonial de la ciudad. Por ello, se adscribirá al proceso penal. “El Gobierno Municipal de Sucre se adscribirá a las acciones legales que lleve adelante la Fiscalía para identificar y sancionar a los autores de ese acto vandálico que afecta la imagen limpia y a la arquitectura de la capital. Esta ciudad reluciente no merece la agresión a su patrimonio por gente propia y menos por extraños, por lo que repudiamos y condenamos la acción virulenta que debe ser sancionada rigurosamente”, señala un fragmento de la nota.
También el Comité Cívico de Defensa de los Intereses de Chuquisaca (Codeinca) se enfiló a la postura. Exigió que se identifique a todos los autores y que las autoridades locales activen prontamente los mecanismos para velar por la riqueza arquitectónica de la capital.
“Por estas razones, el Comité Cívico condena con toda su energía los graves atentados que han cometido grupos delincuenciales denominados Resistencia Juvenil Cochala contra el patrimonio cultural de la humanidad, como también contra el medio ambiente de forma peligrosa, cuando la población está sufriendo problemas de salud con la pandemia del coronavirus”, cita la misiva, que lleva su rúbrica.
La Fiscalía logró identificar a Yassir Molina como uno de los presuntos responsables de los daños. Espera que los jefes de seguridad policiales brinden sus informes y colaboren con la investigación, pues no solo pintaron las paredes, sino que también han dañado una ventana, de acuerdo con la institución. “Inicialmente, se identificó al señor Yassir Molina como cabeza del grupo y se debe identificar a la persona que ha perforado una de las ventanas del edificio con un proyectil. Además, se tiene que dar con las personas que maltrataron la infraestructura del Ministerio Público, porque son acciones que deben recibir la sanción penal correspondiente”.
Por su lado, el asesor legal de Patrimonio Histórico del Municipio de Sucre, Román Mancilla, advirtió que se llevaron a cabo “actos delincuenciales” por parte de ciudadanos “inescrupulosos” que pintaron las paredes con tinta roja.
El secretario general de la Fiscalía, Edwin Quispe, mencionó que un cliente de una entidad bancaria resultó “agredido”. “Estas movilizaciones son un atentado al funcionamiento regular de Ministerio Público y un atentado a la sociedad porque había filas en el Banco Bisa, Banco Prodem, Banco Nacional de Bolivia, Banco Fortaleza y no solo hemos sido dañados como servidores públicos, sino también la sociedad en su conjunto, ya que un usuario del Banco Fortaleza fue agredido”, dijo Quispe.
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