Eventos virtuales y propaganda en las redes marcan el inicio de la campaña electoral en Bolivia

Esta campaña electoral es atípica al llevarse a cabo en medio de la pandemia de la COVID-19, que en el país registra 5.398 muertes y 120.241 casos confirmados.

Artes publicitarios de tres candidatos en las redes sociales.

La campaña electoral rumbo a las elecciones de octubre arrancó este domingo de forma atípica en Bolivia, con apenas actos en las calles y eventos virtuales debido a la pandemia de la COVID-19.

Algunas de las principales candidaturas optaron por caravanas en Santa Cruz, la mayor ciudad del país, al estar aún restringida la circulación de vehículos en fin de semana en La Paz, sede del Gobierno y el Parlamento boliviano, por las medidas para prevenir el nuevo coronavirus.

Una de ellas fue la del Movimiento Al Socialismo (MAS) del expresidente Evo Morales, partido favorito en las encuestas aunque sin margen suficiente para evitar una segunda vuelta.

La caravana de vehículos del MAS estuvo encabezada por el exministro y candidato presidencial Luis Arce, que ondeó todo el recorrido la bandera azul del partido y utilizando mascarilla saludó a los transeúntes que esperaban su recorrido mientras vitoreaban su nombre.

A pesar de que se debe cumplir con el distanciamiento social, hubo personas que se aglomeraron para esperar el paso de Arce.

"Estamos reiniciando la campaña para recuperar la democracia y darle al pueblo estabilidad económica, política y social. Es el pueblo boliviano que está harto de los partidos de derecha y quiere volver a tener un país tranquilo", declaró Arce a los medios.

El MAS realizó un rito ancestral con la presencia del candidato a la vicepresidencia y excanciller David Choquehuanca, además de un lanzamiento de campaña digital en la noche hora local.

La alianza Juntos de la presidenta transitoria y candidata presidencial, Jeanine Áñez, inició sus actividades electorales también con una caravana en Santa Cruz, aunque sin presencia de la mandataria interina, ondeando banderas verdes que representan a esta agrupación.

Juntos también realizó el lanzamiento de su campaña digital con una transmisión por redes sociales.

El otro contrincante con posibilidades según los sondeos, Carlos Mesa, expresidente y candidato presidencial por Comunidad Ciudadana, publicó un video en redes sociales en el que señala que su partido propone "soluciones inmediatas" para salvar empleos en sectores más golpeados como la construcción, transporte, turismo y gastronomía frente a la crisis económica causada por la COVID-19.

"Vamos a ganarle al fraude, a la corrupción y al coronavirus porque la gente está primero, por una Bolivia mejor, mucho mejor" expresó Mesa.


ELECCIONES CON BIOSEGURIDAD

Esta campaña electoral es atípica al llevarse a cabo en medio de la pandemia de la COVID-19, que en el país registra 5.398 muertes y 120.241 casos confirmados.

El órgano electoral recordaba el sábado que los actos electorales "deben apegarse a las medidas de seguridad sanitaria" estipuladas por las autoridades, al igual que la votación en octubre está prevista con medidas de bioseguridad.

Las elecciones en Bolivia están previstas para el 18 de octubre tras cambiar dos veces la fecha por la pandemia, pues inicialmente debían llevarse a cabo el 3 de mayo y luego el 6 de septiembre, con ocho candidaturas a presidente, vicepresidente, senadores y diputados, aunque las encuestas solo dan opciones a Arce, Mesa y Áñez, por este orden.

Bolivia vive desde este mes una etapa de "postconfinamiento", con menos restricciones tras cinco meses de cuarentena rígida y flexible en función de los contagios en cada municipio.

Los comicios generales bolivianos están pendientes desde la anulación de los celebrados en octubre de 2019, en los que Evo Morales fue declarado vencedor entre denuncias de fraude a su favor, aún bajo investigación judicial.

Morales anunció su renuncia denunciando que era forzado por un supuesto golpe de Estado en medio de presiones de militares y policías, entre otras, para privarlo de su cuarta victoria electoral consecutiva y sacarlo del poder tras casi catorce años al frente del país.

Fuente: Opinión